Katniss Everdeen, la chica en llamas, ha sobrevivido de nuevo a Los Juegos, aunque no queda nada de su hogar. Gale ha escapado. Su familia está a salvo. El capitolio ha capturado a Peeta. El Distrito 13 existe de verdad. Hay rebeldes. Hay nuevos líderes. Están en plena revolución.
El plan de rescate para sacar a Katniss de la arena del cruel e inquietante Vallasaje de los Veinticinco no fue casual, como tampoco lo fue que llevara tiempo formando parte de la revolución sin saberlo. El Distrito 13 ha surgido de entre las sombras y quiere acabar con el Capitolio. Al parecer, todos han tenido algo que ver en el meticuloso plan... todos menos Katniss.
El éxito de la rebelión depende de lo dispuesta que ella esté de ser una marioneta, a aceptar la responsabilidad de incontables vidas y cambiar el futuro del curso de Panem. Para hacerlo debe dejar a un lado sus sentimientos de rabia y desconfianza. Debe convertirse en el Sinsajo... a cualquier precio.
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Primeramente debo decir que con este último libro, me enamoré de la saga; de hecho los comencé a leer a partir de que vi la película Sinsajo parte 1. A mi parecer es la parte más emocionante porque comienza la rebelión como tal, han destruido el Distrito 12 y confirman que el 13 realmente existe.
Aunque al principio no hay tanta acción, ya que Katniss se está recuperando, todos se están adaptando al Distrito 13, la trama es llevada muy bien, uno se preocupa por los personajes y no sabemos qué pasó con Peeta.
Y por cierto, hablando de Peeta, siento que toma un papel secundario, ya que desde que lo rescatan y ataca a Katniss, sólo permanece en el fondo y de vez en cuando te vas enterando de como va su situación mental después de ser torturado por el Capitolio. Incluso en la parte culminante de la lucha no aparece sino hasta el final del libro. Es lo único que no me gustó, porque a pesar de que había expresado al inicio que me desagradaba este personaje, le llegué a tomar cariño y no me gustó que se volviera un personaje más del libro. Más bien Gale fue el que tomó el papel junto a Katniss toda esta tercera parte, pero como ya sabíamos desde el inicio, Peeta se queda con Katniss.
Hay partes que me impresionaron mucho, que no aparecen en la película, como la forma en la que fueron tratados los estilistas de Katniss por guardarse un trozo de pan (si mal no recuerdo) ya estando en el 13, y desde esas acciones te vas dando cuenta de la verdadera cara de Coin y lo similar que es a Snow. Aunque otra parte que sí sale, que también me impresionó, es cuando le lanzan las bombas a los niños, en el libro es impactante y en la película lo representaron muy bien.
Esta última parte contiene momentos muy emotivos. Lo que más sufrí es que haya muerto Finnick, desde su primera aparición me encantó este personaje y no me gustó que lo mataran; o que Prim también haya muerto, fue tan irónico, ya que por ella comenzó todo, por lo menos la hubieran dejado viva; y una parte que de verdad me hizo llorar tanto en el libro como en la película es cuando aparece el gato y Katniss le dice que ella ya no va a volver. Muchas escenhas que mencionar en este aspecto, pero éstas son las que más sufrí.
Sobre el final. Me gustó, no es totalmente feliz, más bien es un periodo postrevolución en el que todo está bien, pero como siempre sucede en toda civilización, eventualmente las situaciones se repetirán. Por eso me encantó esta parte que dice Plutarch:
"Ahora estamos en ese dulce periodo en el que todos están de acuerdo en no repetir los recientes horrores. Sin embargo, esta coincidencia colectiva no suele durar. Somos seres inconstantes y estúpidos con mala memoria y un don para la autodestrucción. Pero ¿quién sabe? Quizá esta sea la buena, Katniss." (Collins, pág. 487)
Todos intentan rehacer su vida, continuar y Katniss no es la excepción, obviamente se queda con Peeta y tienen hijos, que ya no tendrá que enviar a Los Juegos cuando sean más grandes. Gale se queda en el Distrito 2 y su madre en un hospital (no recuerdo dónde) y al parecer ya no vuelve a ver a Katniss. Un final esperado, pero bonito; me gustó.
Finalmente, una cosa que me llamó mucho la atención, independientemente de la ficción de una novela, es como atraen a la gente por medio de spots televisivos para que se unan a la rebelión. Creo que llevandolo a terminos reales esa sería la forma correcta en la que un pueblo se uniría para cambiar la situación de cualquier país. Si de por sí los gobiernos ya utilizan los medios masivos para controlar a la gente, usar esa misma arma contra ellos, me parece una excelente idea. En la novela no sólo es gente inconforme que hace marchas y propaganda, sino que crean un personaje, un ídolo a seguir, cargan su imagen con spots televisivos en los que hace actos heróicos, le dan a la gente un símbolo (el sinsajo) que llevar y hacen que aparezca por todos lados para que la gente lo tenga siempre en mente. Creo que sí alguna vez alguien desea iniciar una revolución debe tomar los consejos de Suzanne Collins.
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Collins, S.. (2012). Los juegos del hambre: Sinsajo. (7ma. reimpr.) México: Oceano.
